Beneficios de caminar a diario

Dice un viejo refrán que “todo lo bueno es inmoral, ilegal o engorda". Pues bien, en este caso, el refranero no es una síntesis de la sabiduría popular, ya que hay muchas cosas buenas que son legales, morales e, incluso, adelgazantes. Y caminar es una de ellas, una de las más importantes. Todos sabemos que andar es bueno para el cuerpo y el espíritu, ejercita nuestros músculos y articulaciones y libera endorfinas, las conocidas como hormonas de la felicidad, creándonos una sensación de bienestar inigualable.

• Beneficios de caminar todos los días
• › Reduce el estrés
• › Disminuye los niveles de colesterol
• › Caminar una hora al día adelgaza
• › Tonifica piernas, glúteos y abdominales
• › Caminar es beneficioso para huesos y articulaciones
• › Ayuda a dormir bien por la noche

Pero ojo, caminar no es tanto pasear (parándonos aquí y allá para saludar a las amistades o para admirar la ropa de temporada de los escaparates) como andar rápido y con un ritmo sostenido. Es de este modo como ponemos en funcionamiento nuestro organismo y comenzamos a sentir como la vitalidad fluye por nuestras venas.

El sedentarismo es uno de los peores enemigos de nuestra salud y caminar es una de las mejores formas de combatirlo. Por muy ocupados que estemos, siempre se puede encontrar un momento para ejercitar nuestras piernas. Caminar todos los días, al menos durante una hora, asegura una mejoría general de tu organismo y de tu estado de ánimo.

A continuación te mostramos los principales beneficios de caminar.

Beneficios de caminar todos los días

Los beneficios de caminar todos los días son visibles desde el primer momento, no es una actividad que te obligue a esperar meses y meses para observar sus buenos resultados. Desde el primer día sentirás como tu sistema nervioso se templa, como el estrés se controla, como ves las cosas desde otra perspectiva y te ayuda a tomar importantes decisiones en tu vida. Y, a un nivel más físico, sentirás que tus músculos se hacen más resistentes y los achaques de las articulaciones empiezan a ceder.

En definitiva, andar es bueno y, además, es gratis. ¿Qué más puedes pedir? Y ya sin más dilación, vamos a ver qué beneficios tiene el caminar.

Reduce el estrés

Nuestra sociedad es una fábrica de estrés, somos esclavos de unos horarios laborales a veces imposibles de conciliar con nuestra vida familiar, las distancias en las ciudades son tan grandes que para realizar un par de gestiones ocupamos toda la mañana, incluso cuando nos vamos de vacaciones tenemos que sufrir unos enormes atascos que nos fatigan más que el trabajo. En definitiva, vivimos en un entorno que es una olla a presión y necesitamos una válvula de escape que mitigue el estrés que nos provoca.

Caminar todos los días a buen paso es una de las mejores válvulas de escape para templar nuestro cuerpo y nuestro espíritu. Es una actividad que no solo libera endorfinas, las hormonas de la felicidad, también reduce la producción de cortisol, conocida como la hormona del estrés.

Andar siempre es bueno, pero si quieres combatir el estrés con una mayor eficiencia, hazlo en espacios verdes, rodeado de naturaleza, en el monte, en el campo o en un parque cercano a tu casa o lugar de trabajo. Según numerosos estudios, como el reciente de la Universidad de Princeton, caminar una hora al día en este tipo de entorno natural es mucho más relajante que hacerlo por entornos con estímulos externos más agresivos como calles transitadas o centros comerciales.

Disminuye los niveles de colesterol

El colesterol malo es otra de las “víctimas" de caminar todos los días. Cuando se realiza este ejercicio a buen ritmo durante al menos media hora al día (aunque es aconsejable llegar hasta los 60 minutos), tus pulsaciones pueden llegar a las 120 por minuto, punto a partir del cual empiezas a quemar grasas a toda máquina.

Una de las grandes ventajas de caminar es que es una actividad que está al alcance de todas las personas, siendo indiferente su edad o condición física. Lo importante es mantener un ritmo alto, el que te permita tu estado de forma, y ser constante en tus salidas semanales. Se recomienda un mínimo de 3 días por semana, pero al ser una actividad de baja intensidad, puedes hacerlo a diario. Cuanto más camines, antes sentirás sus efectos positivos.

Caminar una hora al día adelgaza

Caminar una hora al día puede llegar a quemar unas 300 calorías, aunque pueden ser más cuanto más intensos sea el ritmo con el que lo hagas. Puede parecer poca cosa, pero nada más lejos de la realidad. Con esta pérdida calórica puedes llegar a perder entre 2 y 3 kilos de grasa tras un mes de caminatas.

Es evidente que para adelgazar hay que complementar el ejercicio físico con una dieta equilibrada. Si lo que buscas es mantener o recuperar la línea, de nada te servirá meterte una gran caminata si después te mete entre pecho y espalda una fabada con su chorizo y su sidra, y un arroz con leche de postre.

Con una buena planificación dietética y unos ejercicios físicos que incluyan caminar, no tengas la menor duda que en muy poco tiempo podrás lucir una figura digna de la Pasarela Cibeles.

Y un consejo final para adelgazar caminando: utiliza bastones de montaña en tus salidas, aunque no vayas a hacer tus caminatas por el monte. El ejercicio añadido que supone bracear con los bastones aumenta notablemente la pérdida de calorías (por eso es cada vez más frecuente ver a andariegos con bastones aunque sus rutas sean por senderos llanos y regulares).

Tonifica piernas, glúteos y abdominales

Caminar adelgaza las piernas, los glúteos y los abdominales, además de notificarlos. Estas son partes de nuestros cuerpos muy susceptibles de acumular grasa y andar es uno de los mejores ejercicios a la hora de estilizarlos.

Los resultados son visibles en un espacio de tiempo sorprendentemente corto. El fortalecimiento que caminar supone para los músculos de piernas, glúteos y abdominales tiene como consecuencia un aceleramiento del metabolismo y, por tanto, una mayor quema de grasas. En definitiva, a mayor masa muscular, menor masa grasa.

Caminar es beneficioso para huesos y articulaciones

El fortalecimiento muscular es uno de los grandes beneficios de caminar, y a su vez incide de forma directa en la buena salud de nuestros huesos y articulaciones, incluyendo las caderas y las rodillas. Esto se debe a que unos músculos fuertes ayudan a sostener las articulaciones que, a su vez, aumentan su densidad ósea.

También es de destacar que Investigaciones como la del Baylor College de Medicine, del estado norteamericano de Texas, afirman que caminar es una de las mejores formas de reducir el dolor de las rodillas artríticas.

Ayuda a dormir bien por la noche

Caminar no solo nos permite estar más activos y felices durante el día, también nos ayuda a dormir bien por la noche. Y esto no es un asunto menor. Se calcula que alrededor del 35% de la población adulta sufre de insomnio ocasional, más o menos frecuente, y que entre un 10% y un 15% lo sufre de forma crónica.

El descanso, dormir bien, es tan importante para la salud como pueda serlo una alimentación equilibrada, y un ejercicio de baja intensidad como caminar puede ser nuestro mejor aliado a la hora de tener unos felices sueños.

Caminar una hora al día o, lo que es lo mismo, dar 7.000 pasos seguidos y a buen ritmo, lo que supone alrededor de 5 kilómetros de recorrido, es uno de los mejores basamentos para gozar de una salud de hierro. Y si además lo haces en un entorno tranquilo y natural, tu sensación de bienestar será absoluta.