Como ponerse morena rápido y de forma segura

Saber cómo ponerse morena rápido no tiene ningún misterio, basta con desplazarse a la playa o a la piscina, tumbarse al sol y dejar que el astro rey haga su trabajo. Pero, claro, hacerlo a la tremenda puede ocasionarnos serios disgustos. Prácticamente todo el mundo ha sufrido alguna vez quemaduras por los rayos solares, cuyos efectos son de todo menos bonitos: escozor, piel pelada, un calor que no se nos va por más duchas frías que nos demos... Vamos, una auténtica lata. Así que la cuestión es saber cómo ponerse morena y de forma segura.

Para un bronceado seguro entran en juego diferentes factores, como una correcta hidratación, consumir alimentos para ponerse moreno, utilizar cremas bronceadoras y after sun de calidad, saber cuándo tomar el sol...

A continuación vamos a mostrarte algunos trucos para ponerse moreno sin que tu piel sufra por ello.

Trucos para ponerse moreno

El primer punto que debes tener en cuenta son las horas para tomar el sol. Como es lógico, eres muy libre de ir a la playa o a la piscina a cualquier hora, pero debes tener en cuenta que dependiendo del horario de exposición a los rayos solares tu piel puede verse más o menos afectada.

Entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde los rayos solares caen de forma perpendicular, o como suele decirse popularmente, caen a plomo. Esto quiere decir que es el momento en el que tu piel está más expuesta y las posibilidades de que te quemes son mayores.

Por tanto, la mejor hora para tomar el sol y ponerse moreno sin peligro es por la mañana y por la tarde. El sol de mediodía es precioso pero tiene demasiado peligro. Esto no quiere decir que tengas que irte a casa o al hotel, simplemente es un buen momento para hacer uso de la sombrilla.

Una vez aclarado este punto, vamos a ver esos trucos que te asegurarán un bonito bronceado este verano sin necesidad de pelarte como una mandarina.

Beber mucha agua

La hidratación es fundamental para ponerse moreno de una forma segura, tanto por fuera como por dentro. El propio calor del verano es la mejor invitación para darse unas refrescantes duchas que nos deje como nuevos. Lo mejor es hacerlo con agua templada, ni muy fría ni caliente.

Aún más importante es hidratarse a nivel interno, bebiendo al menos dos litros de agua al día (ojo, de agua, no de refrescos ni mucho menos de alcohol, que son más deshidratantes que otra cosa). El consumo de agua mejora la elasticidad de la piel y evita que se reseque y que aparezcan anti-estéticas manchas.

Un truco para una hidratación correcta durante el verano es consumir alimentos ricos en el líquido elemento, como verduras, cítricos o sandías (aunque el precio de estas últimas se haya puesto por las nubes).

Exfoliar la piel

Exfoliar la piel, es decir, eliminar las células muertas de la epidermis, es uno de los mejores trucos para ponerse moreno. Aunque está extendida la creencia de que hay que exfoliar la piel unas 24 horas antes de ir a la playa o a la piscina, lo cierto es que esto podría ser excesivo y contraproducente. Un exceso de exfoliación puede dejar desprotegida la piel y hacerla más sensible a irritaciones o quemaduras.

Exfoliar la piel una vez a la semana es más que suficiente para que puedas lucir un bronceado luminoso e hidratado.

Consumir alimentos que activan la melanina

La melanina es un pigmento celular cuya función es proteger la piel de la radiación solar. A mayor producción de melanina, más morenos estamos. Por este motivo las personas de piel más clara suelen ser más sensibles a las radiaciones solares y se queman con más facilidad.

En definitiva, es importante ayudar a nuestro organismo a que produzca la mayor cantidad de melanina posible cuando tenemos la intención de broncearnos al sol, y para esto nada hay mejor que consumir alimentos que la activen.

Son muchos los alimentos para ponerse moreno, y como la naturaleza es muy sabia, prácticamente todos encajan en lo que podríamos definir como una dieta de verano. Entre los más recomendados se encuentran las frutas y las verduras, que no solo contribuyen a la creación de este colorante natural, sino que además nos ayudan a mantener una línea estupenda, perfecta para lucir en la playa.

Los pescados azules (arenques, boquerones, caballa...) son también muy indicados para ponernos morenos debido a su alto contenido en Omega 3, excelente para mantener la piel elástica y firme.

After sun y crema hidratante

Una sesión de bronceado no termina cuando recogemos la toalla y nos vamos a casa. Para que el moreno quede más bonito y la piel no se resienta es necesario aplicar con posterioridad una crema hidratante y after sun. El objetivo es rehidratar la piel, evitar la descamación, prevenir la aparición de manchas y prolongar la duración del bronceado.

Pero no es necesario precipitarse en su aplicación. Antes de hacerlo, date una buena ducha que te refresque y que abra tus poros, de este modo su efecto será mucho más intenso.

Crema solar y bronceador

Terminamos nuestro repaso a los mejores trucos para ponerse moreno con el que tiene un uso más extendido. Las cremas solares y los bronceadores son nuestros principales aliados en playas y piscinas para conseguir un bonito moreno sin quemarnos la piel. Las jornadas playeras suelen ser muy largas y, como no vayas con cuidado, sentirás los efectos adversos antes de recoger el petate.

Es recomendable aplicar este tipo de cremas como poco, cada dos horas mientras te encuentres expuesto al sol, y también después de cada chapuzón. Las vitaminas y minerales de su composición hidratan y nutren tu piel, aceleran el bronceado y consiguen que este dure más tiempo.

En resumen, no olvides que para ponerte moreno debes elegir la mejor hora para tomar el sol, beber mucha agua, comer alimentos que activan la melanina y cuidar tu piel con cremas naturales específicas para tomar el sol, tanto durante como después de cada sesión. Y a disfrutar del verano a tope.